Normalmente, antes de apuntarnos a un servicio de una red social, un sitio web, o la misma Google, se nos ofrece leer unas condiciones de servicio y políticas de privacidad que nunca nos tomamos el tiempo de analizar las consecuencias que trae el aceptar este contrato.
Si nos ponemos a resumir en lo que consiste este tratado, concluimos que:
Ellos pueden saber todo de ti.
En cualquier ámbito, ellos pueden manipular tu información de manera en que:
1- Nos brinden un mejor servicio.
2- Se beneficien de esta.
Se puede usar el ejemplo de google, un gran imperio que abarca una gran cantidad de los servicios electrónicos que usamos todo los días, a través de lo que buscamos en internet, usan esos datos para mostrarnos publicidad que se asemeje a lo que investigamos.
En Youtube, usan nuestro historial de vistos para recomendarnos vídeos que nos pueden interesar.
Para google, el manejo de información es una parte esencial de su trabajo, y en la política de privacidad se puede apreciar:
- qué información se recopila y por qué la recopilan.
- cómo usan esa información.
- las opciones que ofren, incluido el modo de acceder y actualizar la información.